Con la globalización, la interconexión gracias al internet y el surgimiento de las redes sociales, ahora solo toma un par de minutos o incluso segundos saber qué sucede a lo largo del planeta Tierra, desde sucesos internacionales como conflictos entre Estados del Medio Oriente o protestas en países europeos hasta declaraciones de nuestros políticos latinoamericanos.
Por si fuera poco, no sólo tenemos acceso a información de lo que sucede a nuestro alrededor, sino que también podemos emitir una opinión al respecto ya sea porque no estamos de acuerdo con obras públicas en nuestro sector, porque queremos denunciar una irregularidad o simplemente para crear más contenido sobre esto.
En esta última década, los medios de comunicación se han apoyado en las redes sociales para llevar a los ciudadanos la realidad sobre un acontecimiento. Sin embargo, los medios de comunicación por sí solos no pueden subsistir, necesitan de la democracia ya que es el caldo de cultivo perfecto para el surgimiento de la prensa libre, del debate de ideas y confrontación de opiniones, en general de la libertad de opinión y de expresión.
Sin embargo, actualmente muchos ciudadanos se encuentran en países gobernados bajo un régimen totalitario donde sus derechos son cada vez más y más pisoteados. Los periodistas se enfrentan a la censura como amenaza a la libertad de expresión y en algunos casos a represalias por comunicar la verdad cuando es contraria a las expectativas del régimen, haciendo imposible la labor de ser el nexo entre los ciudadanos y los gobernantes.
Por esto tenemos dos cosas claras, nada es perfecto y en internet todo se puede sacar de contexto. Un artículo de prensa puede ser malinterpretado para ser utilizado en contra del autor, las declaraciones de los políticos son constantemente descontextualizadas y las noticias falsas inundan las redes sociales, lo que se convierte en un aumento de la polarización en la sociedad.
Sumado a esto, lamentablemente la cultura de la cancelación se ha convertido en algo recurrente donde opinar distinto te convierte en blanco de ataques. Esta nueva práctica inició como un movimiento para señalar a artistas estadounidenses por sus opiniones y creencias, algo muy cercano a un intento de corrección política. Sin embargo, esta práctica escaló hasta llegar a ser utilizada contra cualquier persona que emita una opinión «políticamente incorrecta» en redes sociales como Facebook y Twitter. Sin duda alguna, todas las personas se han visto involucradas o afectadas por controversias generadas en redes sociales al igual que inconscientemente se han sumergido en un mar de confusión en medio de hechos que conmocionan a nuestras sociedades.
Tanto los derechos como las libertades, se encuentran entrelazados entre sí lo que puede causar que el exceso de uno signifique un riesgo para el otro. Por esto podemos concluir que gozar de estos requiere de un grado alto de responsabilidad, requiere de conciencia entre los ciudadanos.
Esta publicación expresa únicamente la opinión del autor y no necesariamente representa la posición de Students For Liberty Inc. En el Blog EsLibertad estamos comprometidos con la defensa de la libertad de expresión y la promoción del debate de las ideas. Pueden escribirnos al correo [email protected] para conocer más de esta iniciativa.
