Local Coordinator Program

Search
Close this search box.

Redes Sociales y expresión: Una amenaza a la tiranía

El despertar de gobiernos tiránicos y su afianzamiento en el poder implica callar la rebeldía, siendo una de sus estrategias de fortalecimiento  más importantes y necesarias; revisar la historia política de la Humanidad es encontrar constantemente evidencias de esta premisa. 

Sean gobiernos tiránicos de cualquier corte, callar las voces contrarias es una estrategia necesaria que debe ejecutarse, o las voces acabarán por visibilizar una realidad opresiva y reavivar el espíritu rebelde, que siempre está latente en las entrañas de la ciudadanía. Radio, televisión y prensa han estado bajo la vigilancia del Estado, sufriendo controles, cierres y persecuciones, por ser una amenaza a sus intereses. Sin embargo, esta “amenaza” se ha transformado, exacerbando aún más la lucha en el campo histórico de batalla, donde han estado siempre la libertad de expresión y el poder tiránico peleando, puesto que ahora se suman las Redes Sociales.

¿Redes Sociales? 

Sobre el autor: Yonaiker Oropeza es Coordinador Local de EsLibertad Venezuela

     Internet llega al mundo en la última década del siglo XX, desatando una nueva era marcada por los avances tecnológicos acelerados y la democratización del conocimiento, la llegada de las redes sociales trastorna todos los ámbitos de la vida humana. Estas redes son plataformas virtuales que facilitan la construcción de comunidades de personas en torno a valores, intereses y creencias comunes, cuya característica más importante se halla en la producción de contenido, que ahora está a cargo de los propios miembros de dichas comunidades, y esto es verdaderamente una revolución: no necesitas que canales de televisión informen sobre un acontecimiento importante, cualquier persona en tiempo real puede hacerlo. Esto es verdaderamente una ventaja para el mundo de la transformación política, cuya expresión más inmediata son los activistas sociales o políticos. 

      En tiempos anteriores, los activistas y sus movimientos debían considerar a los medios de comunicación para ser visibilizados, lastimosamente, esto era casi imposible lograrlo en países controlados y gobernados por tiranías, puesto que el Estado hostigaba a los medios o estaban bajo su control, sin embargo, esto cambió, inclusive, para los países bajo el yugo de la opresión y el control estatal, con la llegada de las redes sociales.

     Las redes sociales produjo la transformación del activismo con el surgimiento del ciberactivismo, quebrando la hegemonía de los medios de comunicación tradicionales y el control del gobierno, puesto que cualquier persona puede generar información, visibilizar una realidad, impulsar una causa, hacer seguimiento a las gestiones políticas, todo esto gracias al nuevo mundo de las comunicaciones.

Internet es libertad

     Organizaciones internacionales han destacado a internet como un derecho que debe ser garantizado por los Estados, puesto que éste es vital para el ejercicio de otros derechos fundamentales como la libertad de expresión, acceso a servicios necesarios como la educación y el impulso de procesos de desarrollo. Sin embargo, muchos Estados han ejecutado censura para limitar el acceso libre y universal de su población a internet, puesto que reconocen el potencial que tienen las conexiones virtuales para trastornar sus intereses.

     La justificación que invocan los Estados para aplicar censura en internet es la seguridad nacional, afirmando que se facilitan escenarios para la planificación y promoción de eventos que ataquen la estabilidad e intereses de su país, odio a grupos humanos determinados o impedir el desarrollo nacional. Sin embargo, la supuesta  seguridad que busca el Estado, provoca un mayor incremento en el poder estatal, debilitamiento en redes ciudadanas y reducción de las libertades humanas. También es importante destacar que la tiranía ejecuta “medidas de terror” desarrolladas por organismos de seguridad y células armadas pro-gobiernos que siembran el miedo en las comunidades, surgiendo así el fenómeno de la autocensura.

Cuba hoy es el ejemplo.

     Un factor importantísimo en el surgimiento y desarrollo de las protestas cubanas del 11 y 12 de julio de 2021 fueron las redes sociales, puesto que lives que  transmitían una protesta espontánea en la mañana del 11 de julio en San Antonio de los Baños, produjo como efecto mariposa levantamientos en todo el país, incluyendo su capital. Las redes sociales, especialmente Facebook, permitieron la visibilización de una realidad en el poblado de San Antonio de los Baños, observado por los demás poblados y encontrando las personas elementos comunes, encendió  la mayor protesta en Cuba desde El Meloconazo.

     El gobierno sufrió una alta desestabilización, sus intereses amenazados por un pueblo en rebeldía y el mundo entero por fin pudo ver lo que estaba ocurriendo en Cuba, posicionándose etiquetas como #SOSCUBA. Todo esto despertó la reacción natural de cualquier gobierno no democrático ante el ejercicio de la libertad de expresión: Censura. El gobierno durante las protestas limitó el servicio de internet en más de 20 poblados.  El día 17 de agosto, Cuba tipifica los “delitos en internet”, considerando como antijurídicos mensajes contra el Estado, mensajes ofensivos, noticias falsas, mensajes que promuevan el odio o la violencia, así como convocatorias a movilizaciones. Estas normas son de contenido abierto, lo cual lo deja a interpretación del gobierno, violando así los principios de taxatividad que exige el derecho penal moderno. El Observatorio Cubano de Derechos Humanos ha denunciado esta tipificación como un golpe más al ejercicio de la libertad de expresión del pueblo cubano, dando poder al gobierno no solamente de perseguir a quienes ejerzan la expresión libre, sino justificar los apagones de internet y telefonía en tiempos de protestas.

No hay libertad sin expresión

     La expresión libre, ejercida por cualquier medio, es columna invaluable de la libertad, puesto que un Estado sin ciudadanos expresivos se traduce en un Estado represor y tirano. La necesidad de la libre expresión se resume en que funciona como contrapeso ciudadano en el sistema de distribución y ejercicio del poder político y económico, impidiendo que dicho ejercicio del poder viole los límites que como sociedad han establecido.

     Las libertades políticas y civiles que hoy gozamos en muchos países se deben a ciudadanos que en sus localidades alzaron sus voces ante realidades abusivas, opresivas e inhumanas propiciados por sus gobiernos, visibilizando realidades y exigiendo cambios, he allí la histórica importancia de la libre expresión para el constante fortalecimiento de la libertad en todo su esplendor. Esta batalla por la libre expresión se ha trasladado hoy de la televisión y los periódicos a las redes sociales, y como tal se debe exigir a los Estados: acceso libre y universal a  internet, taxatividad en los criterios de determinación de delitos de odio, libertad de ideas en la producción de contenidos y mensajes, facilidad para la inversión privada en las telecomunicaciones y  libertad de la actividad infociudadana y ciberactivista.

     La ciudadanía tiene el deber de exigir al Estado asumir una visión antropocéntrica del ejercicio del poder, no estatocéntrica. Hoy, esa bandera debe ser tomada con fuerza en el campo de las redes sociales, donde día a día la libertad de expresión se está viendo atropellada por el monstruo de la tiranía y el control. Internet y acceso a redes sociales son condiciones necesarias para la libertad de las generaciones de hoy y del futuro.


Esta publicación expresa únicamente la opinión del autor y no necesariamente representa la posición de Students For Liberty Inc. En el Blog EsLibertad estamos comprometidos con la defensa de la libertad de expresión y la promoción del debate de las ideas. Pueden escribirnos al correo [email protected] para conocer más de esta iniciativa.

Entradas relacionadas

Students For Liberty is the largest pro-liberty student organization in the world.

To get started, please select your region on the map.

Asia Pasific