Quizá a cualquiera relativamente involucrado con la economía, ciencias políticas y sociales, leer la palabra “mano” le haría pensar en la famosa Mano Invisible de Adam Smith, acá voy a hablar de una mano visible que nace a partir de las ideas de Smith, una mano con cinco dedos, cinco ideas, cinco propuestas, palpables, reales, posibles, innovadoras, necesarias y beneficiosas.
A raíz de la reciente celebración del IEEP (Instituto Ecuatoriano de Economía Política) por sus 30 años de existencia, se dio a cabo un panel que recogió opiniones de expertos sobre el Foro Libertad y Prosperidad, el cual propone cinco reformas para convertir a Ecuador en una sociedad libre y próspera con instituciones fuertes y eficientes. Me voy a dar la tarea de comentar estas propuestas, esta lectura no será muy técnica o especializada, pues para eso invito a los interesados en revisar la propia página del IEEP en el cual encontrarán tanto un resumen como el documento completo del foro, comentaré estas propuestas desde mi perspectiva, y con el objetivo de incentivar a más personas a revisarlas, pues creo yo, que conocerlas es clave para tener cierto norte claro para el futuro del Ecuador.
La primera de las reformas se refiere el tamaño del estado, enfocar de forma efectiva el gasto público y disminuir la carga tributaria de los ciudadanos. El gasto es sagrado cuando hablamos de educación, salud y seguridad, así que enfocar a que el gasto sea eficiente y suficiente en estos aspectos es clave, pero disminuir la carga burocrática e ineficiente del gasto es clave, no estamos en posición para ser pródigos con el dinero de los ciudadanos, además es menester planificar como obtener ingresos de bienes muebles e inmuebles que estén en manos del Estado y se encuentren sin actividad o sin generar ningún tipo de beneficio. Es más que necesario que se busquen las formas adecuadas de obtener ingresos para los sectores nombrados previamente, pero no podemos pretender que la carga tributaria sea absolutamente abusiva para cumplir con estas metas, que el estado cobre más impuestos no es sinónimo de algo bueno, o que aumenta la riqueza de la nación, únicamente es llevar recursos de una mano a la otra y en ocasiones esta última mano (el Estado) maneja estos fondos de forma menos eficiente en comparación como lo harían los agentes individuales. Acá no digo que no tengamos impuestos, pues es claro que existen grupos de la población que se benefician de programas sociales que se logran financiar mediante este medio, pero debemos tener una tributación coherente, en la cual logremos expandir la base de contribuyentes, con tasas relativamente bajas, al menos que guarden concordancia con el promedio de la región. La cuestión tributaria debe tener relación con la situación económica nacional, los pequeños emprendimientos y las pymes tienen gran influencia en la actividad económica, y quitarle ganancias que obstaculicen su funcionamiento y crecimiento afecta directamente a una posible generación de empleos.
Precisamente el siguiente punto que nos exponen es sobre el empleo, es inadmisible tener una legislación laboral que no se adapte a las condiciones actuales de la sociedad ni a las necesidades de quienes desean empezar a formar parte del sector productivo nacional, es necesario tener el trabajo por horas que beneficie a aquellos estudiantes que quieren estudiar y trabajar a la vez, que tenga en cuenta a aquellas madres o padres solteros que busquen trabajar en horarios más cortos debido a que necesitan dedicar tiempo para cuidado de sus hijos, que existan condiciones que permitan a las personas sin experiencia adquirirla y con el tiempo subir poco a poco sus niveles de ingresos junto a sus capacidades dentro del mercado laboral, que facilite la contratación mediante el trabajo remoto con empresas del extranjero, es clave que la contratación sea sencilla, como decía previamente, los pequeños emprendimientos y pymes tienen gran importancia en la economía nacional, y muchas veces a pesar de necesitar mano de obra es muy complicado contratar debido a que las regulaciones y leyes no lo facilitan. Es necesario quitarse de la cabeza que flexibilizar el mercado laboral es algo negativo, flexibilizar significa que más personas podrán entrar a trabajar, con más personas dispuestas a trabajar y dispuestas a contratar los salarios se fijarán en torno a la productividad y realidad económica. Más personas formando parte del sector productivo nacional y contando con respaldo legal es lo que podría llevar la economía ecuatoriana a un nivel mayor de crecimiento y reducir las complicaciones que conlleva la informalidad.
Nuestro tercer punto de análisis se refiere a que el fruto de tu trabajo esté bajo tu control, el monopolio de la seguridad social del IESS es ineficiente, se asemeja a un sistema piramidal que no se ha dado cuenta que la estructura poblacional ha cambiado y que su metodología está condenada al fracaso y al colapso total en tan solo unos cuantos años. El foro propone un sistema de capitalización individual en el cual los participantes sean los trabajadores y AFP (Agencias de fondo de pensiones), una relación en la cual los trabajadores escojan según su preferencia la institución que maneje sus ahorros, las cuales por su puesto deben rendir cuentas y mantener informado a cada cliente el estado de sus ahorros y sus rendimientos. Otro de los grandes beneficios de esta propuesta es que los ahorros de los ciudadanos no están a merced del panorama político o autoridades de turno. Es interesante la respuesta que da el foro ante la seguridad de salud, pues se plantea que cierto porcentaje del ahorro se destine a instituciones especializadas en ofrecer planes de salud pre-pagadas o seguros de salud según la preferencia del trabajador, teniendo así un mejor servicio que el que reciben actualmente. El resumen de este punto puede ser que tus ahorros sean realmente tuyos y que ofrezcan los beneficios que realmente mereces de tu propio trabajo.
La cuarta y quinta propuesta tienen mucha relación entre sí, y a nivel personal, son las que más me apasionan, la internacionalización del sistema financiero y la apertura comercial. Ecuador tiene un gran comodín llamado dólar, pero desde que esta empezó a ser la moneda de curso legal aún no se le ha sacado todo el provecho que se podría, atraer a más actores al sector bancario es clave para que las tasas de intereses sean más atractivas para la ciudadanía y para que el sector productivo cuente con un mejor flujo de capitales, simplificar la legislación para facilitar la liquidez nacional y que estos actores tengan libertad de utilizar sus capitales en cualquier industria ya sea dentro y fuera del territorio nacional. La idea en sí es asemejarnos a los provechos que ha logrado Panamá gracias al dólar.
El contar con mayor capital extranjero y mejores condiciones de liquidez nos vincularía al mercado internacional con mayor presencia. Será clave establecer nuevas relaciones con socios comerciales y mejorar las ya existentes estableciendo un marco legal sólido y simple para generar confianza en la comunidad internacional, atraer nuevas empresas que generen nuevas plazas de trabajo, involucrarnos en proyectos con el extranjero y así formar parte de la creación de valor agregado dentro de distintas cadenas productivas globales, aumentar la llegada a distintos mercados, integración que no solo beneficiará al comercio en sí, sino al desarrollo de mejores productos locales dada la competencia y el acceso al knowledge internacional. No debemos dejar pasar que tener más productos dentro de territorio nacional también beneficia sin duda a los consumidores, permitiendo acceder a mejores productos y a mejores precios. Aprovechar el beneficio de tener al dólar, mejorar el sistema financiero y generar condiciones optimas para el comercio nos da una serie de condiciones adecuadas para hacer de Ecuador un gran referente del comercio mundial.
Es claro que las propuestas están abiertas al debate y que quizá no a todos les parezca lo mejor o lo más posible de hacer, sin embargo, invito a todos a revisar el Foro completo en la página del IEEP y así informarse más a fondo sobre los temas en cuestión, pues también dependerá de la ciudadanía y no solo de autoridades de las propuestas necesarias se lleven a cabo.
Como decía J. B. Say: “Para que una nación goce de los beneficios de un buen sistema económico, no basta que sus jefes sean capaces de adoptar los mejores planes, sino que además es necesario que la nación se halle en estado de recibirlos.”
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