El amor puede convertirse en todo lo que ves en las películas o te puede cegar para vivir en una mentira. Actos pequeños que no parecen malos concluirán en pesadillas, pero nadie puede salvarte porque no saben llegar a ti en ese nuevo camino.
El amor, aunque sea el más puro en el mundo, no será relevante mientras no encuentres quien pueda valorarlo. Puedes mover cielos, tierra e incluso pensar en renunciar a tus sueños por ese amor; inigualable, deslumbrante y reconfortante, donde ni el día ni la noche puede alejar tus pensamientos de ese sentimiento, pero con el tiempo, con tantos golpes, con tantas lágrimas derramadas comprendes que ni la inocencia o pureza de los anhelos importará mientras la otra persona no sienta lo mismo que tú. Podrás rogar, orar o embrujar, sin embargo, el amor no es correspondido.
Puede ser la sensación más impresionante, la alegría tan inmensa que sientas que tu cuerpo puede explotar con él y no te das cuenta que ese amor pudo pertenecer solamente a ti hasta que esa chispa dentro de ti se va consumiendo, día con día y el brillo de tus ojos, la sonrisa que contemplas desaparece.
Tu amor y tus nervios parecen ir de la mano, entiendo que con un pequeño detalle todo puede dar un giro inesperado, las sonrisas se tornan en lágrimas y sollozos, la seguridad en parte del pasado y lo único que no notas es como tu espíritu se desvanece.
La peor parte es cuando te das cuenta poco a poco como te pierde a ti mismo, como las risas de la madrugada se tornan en llanto. Como un fin de semana puede transformarse en desvelos y miedo. En la espera se convierte en temor. En la sensación de que cualquier paso en falso puede ser un error.
Vivir anhelando los recuerdos solo te va destruyendo, te mata lentamente y tu dejas morir esa esperanza.
Parece irracional como algo tan especial se transformó en una pesadilla, ¡Cuánto desearía regresar al pasado para cuidar de mí mismo!
El amor puede convertirse en todo lo que ves en las películas o te puede cegar para vivir en una mentira. Actos pequeños que no parecen malos concluirán en pesadillas, pero nadie puede salvarte porque no saben llegar a ese nuevo camino a ti.
Si eres hombre, mujer o como quieras reconocerlo, jamás permitas que un amor sea tu perdición. Amate, quierete y cuidate, nadie mejor que tú sabrá cómo volver a brillar.
Esta publicación expresa únicamente la opinión del autor y no necesariamente representa la posición de Students For Liberty Inc. En el Blog EsLibertad estamos comprometidos con la defensa de la libertad de expresión y la promoción del debate de las ideas. Pueden escribirnos al correo [email protected] para conocer más de esta iniciativa.