El falso dilema económico y crisis anunciada

Por: Luis Gustavo Cuellar Alfaro

País: Bolivia

En los últimos meses Bolivia ha estado lidiando una situación de inestabilidad
económica cada vez más grave: la escasez de dólares. Esta situación no es repentina
ni inesperada. De hecho, hace un par de años, en un artículo previo, se advirtió sobre
la posibilidad de esta crisis cuando las reservas internacionales se agotaron. De igual
forma, académicos como Mauricio Rios, lo estarían advirtiendo años atrás. Sin
embargo, el gobierno no ha tomado medidas efectivas para estabilizar la situación, lo
que ha exacerbado el problema y ha dejado a la población en una situación de
incertidumbre y dificultades económicas.
La escasez de dólares tiene múltiples causas, pero una de las principales es la mala
gestión económica y política del gobierno. Durante años, se han observado prácticas
económicas insostenibles, como el gasto excesivo, la corrupción y políticas monetarias
erráticas. Estas prácticas han erosionado gradualmente las reservas internacionales
del país y han debilitado su capacidad para hacer frente a crisis económicas como la
que enfrenta actualmente, demostrada no solo con la evidencia frontal, al buscar
comprar dicha divisa en los bancos privados o casas de cambio habituales, sino
también, cuando el gobierno oculta información, en compañía con el Banco Central de
Bolivia.
La respuesta del gobierno ante esta crisis ha sido inoportuna y lenta.
En lugar de implementar políticas económicas coherentes y efectivas, las autoridades
han recurrido a medidas improvisadas y a corto plazo que no abordan las causas

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subyacentes del problema. Por ejemplo, se han impuesto restricciones a la compra de
dólares y se han implementado controles de cambio, lo que ha generado (y con mucha
razón) que las personas que poseen de tal divisa, prefieran no guardarla en bancos o
realizar transacciones con la misma, lo cual y de nuevo con justa razón, elevó su
precio en el mercado.
No existen luces claras a futuro, ni intenciones de parte de la clase gobernante en
cambiar el panorama o tomar acciones repentinas, no lo hicieron en su momento y
mucho peor lo harán hoy.

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