Nos lo prohíben, alguien lo ofrece y nosotros lo tomamos sin medir consecuencias, ¿Las libertades civiles en México son sólo tema del Gobierno? .
La población mundial se ha visto vulnerada tras la presencia de un nuevo virus que se propaga generalmente por las vías respiratorias, afectando principalmente a nuestros pulmones y progresivamente a todo el sistema vital, dándonos como resultado hasta el momento en el que escribo este artículo un total de ciento sesenta y ocho mil quinientas cincuenta y tres muertes en el continente americano, según los datos que nos presenta la Organización Mundial de la Salud (OMS), tras estos acontecimientos que escapan de toda comprensión y que pareciera por un momento que nuestros más grandes maestros de la literatura de terror y suspenso se han reunido para colaborar en una obra épica, muchos de los sistemas gubernamentales del continente se han visto vulnerados no solo en el rubro de la salud pública sino también en el de su economía.
Tomando en cuenta lo anterior, encontramos opiniones contrarias en cada uno de los gobiernos, que no solo dependen de la ideología que más remarcada se encuentre en los mandatarios de las distintas naciones que componen a América, sino que también debemos tomar muy en cuenta los factores con los que cuentan y a los que se enfrentan. Mientras que en Estados Unidos de América se vive una trifulca civil, debido al reciente homicidio de un afroamericano a causa de la negligencia y el notable abuso de poder de un policía que para su mala suerte no se asemeja al color de tez de su víctima. En México se inaugura una de las más grandes obras que la sociedad mexicana ha podido ver, nada más y nada menos que un tren diseñado con la más alta tecnología que albergará cientos de turistas deseosos de presenciar las maravillas naturales y la riqueza arquitectónica de nuestro bello Estado de Yucatán, en fin, como venía comentando, el Covid-19 parece ser un mismo virus que recibe un tratamiento variable que, dependiendo del momento y la zona en que se presente, los intereses gubernamentales o de cierto sector que funge como un tomador de decisiones nacionales, contrapuestos a ciertos intereses poblacionales e individuales que son representados por los ciudadanos de determinado país, no están yendo de la mano, tú para allá y yo acá, durante el transcurso de este vaivén de conveniencias se produce cierta fricción pues aunque muchos necesiten salir de su hogar para poder emplearse y conseguir dinero para pagar sus deudas o los recursos que necesitan para vivir otros tantos (en menor cantidad), deciden declarar toques de queda o cierre a establecimientos para evitar mayores contagios en su población, porque aunque muchos de estos cierres a negocios se produzcan muchos otros (en mayor cantidad) deciden salir y reunirse en hogares de amistades con más de veinte personas en una habitación a beber alcohol y bailar la noche entera sin pensar siquiera que fuera la presencia de un virus está causando estragos, porque aunque los otros, aquellos que son menos en cantidad decretan leyes que prohíben la venta de alcohol tomando como uno de tantos pretextos el que si se deja de vender alcohol por lógica (su lógica) es que no habrá reuniones con tantas personas y no habrá más contagios, inteligente ¿no? Pero no contaban con que en alguna Entidad Federativa se les prendiera el foco y decidieron vender alcohol adulterado, obviamente a espaldas de las autoridades, más inteligente ¿no?, debido a esta actividad se produjeron algunas muertes por el consumo de alcohol adulterado, y sí, en una vaivén de confrontaciones de intereses en donde las libertades civiles son parte de la historia México se terminó alzando como el país con más muertes por el coronavirus ¿Quién lo diría? El país que concentra un tercio de su población total dentro de los parámetros de obesidad y que es uno de los factores importantes para que el virus genere mayor daño termina siendo centro de atención internacional a causa de sus muertes.
Cabe preguntarse si las libertades civiles son en realidad un tema necesario solo para la agenda gubernamental o si es necesario que nosotros, como individuos, nos planteemos una reflexión acerca de las mismas, como lo menciona Friedrich von Hayek en su obra “Los fundamentos de la libertad”:
“La libertad no sólo significa que el individuo tiene la oportunidad y responsabilidad de la elección, sino también que debe soportar las consecuencias de sus acciones y recibir alabanzas o censuras por ellas.
La libertad y la responsabilidad son inseparables.”
Los liberales debemos proclamar por la mínima intervención del Gobierno en nuestros proyectos de vida pero, al mismo tiempo, debemos conducirnos con toda responsabilidad en cuanto a nuestras acciones y en la medida de lo posible difundir ese mismo concepto, el de la responsabilidad, a nuestro círculo social.
América cuenta con un haber muy amplio de dictaduras y de profetas que transgreden nuestras libertades pero al mismo tiempo también cuenta con una ignorancia e irresponsabilidad terrible por parte de la mayoría de sus ciudadanos cada que ejercen sus libertades civiles.
Libertad para tomar decisiones y libertad para aceptar sus consecuencias.
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