Friedrich Von Hayek – Repasando su Legado


Todo arrancó con el liberalismo. En Europa, en los siglos XVII y XVIII comenzaron a crecer las ciudades y con ellas, una burguesía que se enfrentaba, por un lado, al poder político de los reyes y de los nobles, y, por el otro, al poder espiritual de los papas y de los obispos. De ahí las dos separaciones fundamentales que iban a instalar los ideólogos liberales: una, económica, entre Estado y mercado; y otra, política, entre Estado e Iglesia.


Mirko Daian Scattone

Coordinador Local Estudiantes por la Libertad. Profesor en Ciencias Políticas. 


Introducción:

Todo arrancó con el liberalismo. En Europa, en los siglos XVII y XVIII comenzaron a crecer las ciudades y con ellas, una burguesía que se enfrentaba, por un lado, al poder político de los reyes y de los nobles, y, por el otro, al poder espiritual de los papas y de los obispos. De ahí las dos separaciones fundamentales que iban a instalar los ideólogos liberales: una, económica, entre Estado y mercado; y otra, política, entre Estado e Iglesia.

Principales Postulados:

Vida y Obra:

Friedrich August Von Hayek nació en Viena en 1899, durante la Primera Guerra Mundial fue llamado a las filas, peleo como oficial de artillería en el frente italiano, quedo sordo de un oído y contrajo malaria. Terminada la guerra, regreso a Viena, donde comenzó sus estudios.

Se inscribió en Jurisprudencia, asistiendo sobre todo a clases de Economía y Psicología. En 1921 termino sus estudios de Jurisprudencia con un doctorado. Ávido de saber, decidió continuar estudiando una segunda carrera: Ciencias Políticas.

Hayek trabajo en la Oficina de Cuentas de Austria, donde se trataban las cuestiones de los pagos por reparación y costos como consecuencia de la guerra. Allí conoció a Ludwig von Mises, uno de los representantes más importantes de la Escuela de Economía austriaca, quien expone la inviabilidad del socialismo, siendo no solo mentor de Hayek sino su amigo.

Durante su estancia en Norteamérica, Hayek reunió importantes conocimientos sobre los métodos para investigar el ciclo económico, a partir de eso proyecto levantar un instituto para la investigación de la coyuntura. Junto con Mises fundo en 1927 el Instituto austriaco para el Análisis del Ciclo Económico, Hayek se consagro al tema de los ciclos económicos, desarrollando una nueva teoría de la coyuntura y elaborando análisis de complejidad.

Hayek y Mises habían anticipado la mayor crisis de la economía global, aportando motivos de porque se desato, además se convirtió en el primer profesor extranjero en exponer en la London School of Economics de Gran Bretaña.

A los 50 años, Hayek abandono Inglaterra, y se dirigió a la Universidad de Chicago, donde trabajo con Milton Friedman. Allí escribió Los fundamentos de la Libertad.

En 1974 recibió el Premio Nobel de Economía, irónicamente recibió esta distinción con el socialista sueco Gunnar Myrdal (Fundador del modelo de bienestar en noruega). En Suecia no era posible otorgar la distinción solo a Hayek por motivos políticos.

Hayek muere en Friburgo el 23 de marzo de 1992.

 Obras importantes:

Camino de servidumbre:

Se ocupa de cuestiones políticas y filosofía social. En este escrito contra el socialismo Hayek resume lo que motivo el trabajo de toda su vida: la disputa contra cualquier forma de administración central. Hayek buscaba advertir sobre los peligros de la economía planificada, según él, los colectivismos y los derechos individuales de libertad no son compatibles. En el socialismo, la libertad individual queda recortada de forma automática. El nacionalsocialismo alemán, y el fascismo italiano son desarrollos del socialismo, al igual que el comunismo en la Unión Soviética, todos estos sistemas condujeron a la opresión y a la dictadura. Keynes elogio la publicación de “Camino de Servidumbre”. Reconociendo que se encontraba de acuerdo con prácticamente todo lo expuesto.

El libro de Hayek, Camino de servidumbre —en alusión a la frase de Alexis de Tocqueville “el camino a la esclavitud”— fue publicado en el Reino Unido el 10 de marzo de 1944. De inmediato generó controversia puesto que explicaba de manera sencilla y clara la relación entre la libertad individual y la planificación económica centralizada. Para Hayek, las ideas colectivistas —ya sean de izquierda o de derecha— no conducen a una utopía sino que al darle cada vez más poder al Estado para controlar la economía, inevitablemente conducen a horrores como los de la Alemania Nazi y la Italia Fascista.

Con su Camino de servidumbre mostró cómo los colectivismos parten de unos mismos principios que tratan de anular los derechos individuales para sacrificarlos en el altar del colectivo y que conducen a la sociedad al caos y a la miseria.

De este brillante libro, me gustaría destacar un capítulo en especial:

Capitulo X: ¿Por qué los peores se ponen a la cabeza?

La corrupción no es una plaga que en forma repentina se apodera de una sociedad, es la consecuencia del estatismo, en razón de extralimitaciones legislativas amplia la quiebra de las instituciones políticas democráticas, la violación de los derechos individuales y la consiguiente decadencia económica.

Hayek sostiene que el hombre de estado democrático, que se dispone a planificar la vida económica de la sociedad tiene pronto que optar entre asumir poderes dictatoriales o abandonar sus proyectos, de la misma manera, el dictador totalitario tendrá que elegir entre prescindir de la moral ordinaria o fracasar, de ahí que en una sociedad que tiende hacia el totalitarismo, los faltos de escrúpulos tienen más probabilidades de éxito.

Los fundamentos de la Libertad:

Su opus magnum, un libro teórico sobre filosofía social, donde analiza de forma sistemática el concepto de sociedad liberal, según Hayek este tipo de sociedad no es construible, sino más bien es el resultado de un orden espontaneo.

Básicamente, Hayek subraya el hecho de que el conocimiento está disperso en la sociedad y que para dirigir una sociedad necesitaríamos ser dioses ya que la multitud de gustos, opiniones,…impedirían que los mandatos coactivos emanados de la autoridad central tuviesen éxito. Pero no sólo se queda ahí.

Añade que ni el socialismo puede funcionar pero tampoco un Estado que interfiera en la formación libre o espontánea de las instituciones propias de nuestra civilización como el mercado, el lenguaje y muchas costumbres que se convierten en esenciales por perdurar en el tiempo al funcionar correctamente. La defensa del orden espontáneo siempre encuentra oposición en quienes, como denomina Hayek, son racionalistas constructivistas. En definitiva, que utilizan la razón para cuestiones que a ella misma la superan. Intentan reformar desde el mundo de las ideas sin tener en cuenta los múltiples factores que afectan a cada decisión o reforma.

No pueden conocer las consecuencias imprevistas de cualquier decisión porque, al igual que no podemos conocer el futuro, al tratar con seres humanos no podemos prever cada movimiento que den. Podemos dar predicciones cualitativas (pattern predictions) pero no cuantitativas. No podremos saber cuánto aumentará el PIB si tal o cual reforma se lleva a cabo pero sí que aumentará, por ejemplo.

Sin duda, Hayek creía que el siglo del socialismo (el siglo XX) había sido el siglo de la entronización de la razón y que por ello, había que defender un racionalismo.

En otra de las secciones del libro se rastrea la historia del pensamiento liberal hasta el inicio del declive tras la primera guerra mundial. Citando a Smith señala que su meritoria “contribución fue la idea de un orden que se autogenera y se construye espontáneamente si los individuos se someten al freno de leyes apropiadas” (Von Hayek, 2014).

A partir de la primera gran guerra se intenta “prolongar la prosperidad y asegurar el pleno empleo mediante la expansión de la base monetaria y el crédito” introduciendo la inflación (un impuesto oculto) a escala mundial. De ahí al paro masivo no hubo que esperar mucho como los propios Mises y Hayek advirtieron en la década de los veinte. Por otra parte, Hayek diferencia entre dos liberalismo: el de origen francés-racionalista e inglés o evolutivo. El primero acabará a juicio de Hayek por introducir el socialismo mientras que el inglés por su prudencia y valoración de la tradición tendera por defender la sociedad liberal

La obra se divide en tres partes:

Hayek y la Argentina:

En este apartado me permito realizar un análisis serio de los postulados de este economista con la historia política y económica de nuestro país. A lo largo de nuestros años de historia en general lo que se ha oído hablar de liberalismo básicamente parte del desconocimiento de quienes lo intentaban definir o la errada idea de confundir a esta teoría con “algo” llamado “neoliberalismo”, es interesante plantear esta falacia ya que el liberalismo es la teoría que aboga por la libertad, y a mi entender o hay libertad o no la hay, no puede existir una teoría que hable de nueva libertad ya que no se puede analizar desde una base teórica esos postulados. Lo que se ha querido asociar al liberalismo como “neoliberalismo” fueron en general gobiernos que han contraído deudas, provocado la pérdida de millones de puestos de trabajo, aumentado el nivel del estado y cometido innumerables actos de corrupción

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